Previo al inicio de la “Escuela para padres Sexualmente Santos”, los correos de todo el equipo de Sexualmente Santos sonaban sin parar, era por el estrepitoso sonido de una marea de padres que se agolpaba a registrarse antes de la hora para iniciar esta capacitación tan poderosa como singular.

La reunión comenzó a las 7:00 pm, y los recuerdos de las propias batallas que no se lograron antes ganar se mezcló en el aire con la esperanza de esta generación de hijos si la ganará. Y así, con el fragante olor a victoria que fielmente transmitió la videoconferencia realizada para esta reunión, comenzó esta jornada de capacitación tan excepcional pues a 90 padres reunió.

90 hombres y mujeres, fue el conteo final de los que iniciaron este viaje hacia la libertad sexual generacional. Pero son incontables las batallas que se ganarán, porque aquél que es formado, sabe cómo pelear, y sin lugar a duda, replicará todo lo que aprenda y logre su pensamiento transformar.

Como grupo de Sexualmente Santos, estamos expectantes de lo que Dios hará en este grupo de padres una vez que terminen esta capacitación y salgan empoderados por la verdad: que esta batalla se puede ganar, y que sus hijos no tendrán que vivir ni saborear las lágrimas amargas que ellos tuvieron que probar.

Pero existe un grupo, que aunque fue formado y se les habló desde la infancia con la verdad sobre la sexualidad, ha optado por la humildad, y ella les permite entender que siempre hay algo más que aprender si de verdad se quiere ganar. Por qué, ¿si el enemigo se actualiza constantemente para nuestros hijos atacar, porque nosotros nos quedaremos atrás y no nos hemos de capacitar?; por eso celebramos que entre todos aprenderemos y ganaremos esta batalla por nuestros hijos, y por nuestra ciudad.